Denuncian que 1000 efectivos policiales no cobran los "servicios adicionales" realizados

Por medio de un circular los efectivos conocieron que se postergó el pago del trabajo realizado. Por otro lado, la inseguridad crece insospechadamente. Un periodista y una dirigente política usaron las redes sociales para denunciar que fueron objetos de la inseguridad.

Locales10/05/2022Daniel G. SolarDaniel G. Solar
Inseguridad

Desde hace un tiempo la inseguridad en la provincia de San Juan registra una serie de violento asaltos que llaman la atención y pese a las capacitaciones o compra de material de última generación por parte de la secretaria de Estado de Seguridad la delincuencia tiene en jaque a los sanjuaninos.

Dia a día los hechos de inseguridad son moneda corriente. Y el colmo de los sucesos lo vivió el periodista Oscar "Gallego" Rodríguez, de Telesol, al vivir en carne propia lo que sufren los vecinos del barrio Catani. Barrio hasta donde llegó para cubrir una nota periodística solicitada por quienes viven en ese sector.

Otro de los hechos es el robo de una bicicleta que una joven usaba para salir de su depresión. Y otro es el robo, sin sentido, en una escuela del departamento Ullum.

En las últimas horas Alejandra Caneva, referente de la Mesa de Mujeres del Frente Renovador, subió a su cuenta de Facebook un alerta luego que su hijo sufriera el robo de su mochila que estaba en su camioneta. Los ladrones estallaron uno de los vidrios de la movilidad que estaba estacionada en las cercanías de Hermógenes Ruiz y avenida José Ignacio de la Roza.

Muchos hechos de inseguridad y nadie entiende porqué suceden cuando la gestión de Munisaga "marquetinea" la compra de elementos para capacitar a la Policía o firma con el ministro de Seguridad de la Nación convenio para obtener más fondos destinados a la fuerza policial. 

Hay algo que no concuerda. La inseguridad, al parecer, está incontrolable pero en estos tiempos de inflación galopante los "guardianes del orden" también sienten el efecto inflacionario en sus magros sueldos. Y muchos de ellos recurren a los famosos "adicionales" para arrimar unos pesos.

Según una denuncia llegada a nuestra mesa de trabajo, "hay como 1000 policías a la espera que se le deposite el tan bendito adicional". Esa simple sentencia nos permitió conocer una situación bastante irregular que están viviendo los efectivos policiales que deciden hacer los servicios adicionales.

El mensaje simple y concreto denunciaba que: "Es inédito o increíble que después de esperar dos, tres y, a veces, 5 meses para poder cobrar las adicionales y cuando las cobramos el BANCO SAN JUAN BLOQUEA LOS CAJEROS. Hay como 1000 policías a la espera que se le deposite el tan bendito adicional. Ya es el colmo y encima no se puede denunciar, no se puede llamar al banco san juan, no se puede llamar a nadie. San Juan, la provincia de las oportunidades de los que tienen plata y los pobres que se jodan".

La Circular General N° 23/2022, de la División Contaduría de Servicios Especiales de la Policía de San Juan, le comunicó al personal policial que realiza los adicionales que "debido a tareas de mantenimiento en el sistema bancario" el pago de los servicios adicionales se "llevarán a cabo CONFORME A DISPONIBILIDAD BANCARIA".

Sin adicionales
Es sabido que las fuerzas del orden están impedidas por ley realizar paro o quite de colaboración como cualquier gremio realiza en Argentina. También es conocido que las empresas, las municipalidades y las actividades deportivas necesitan y recurren a los "servicios adicionales de vigilancia". Servicio que no negocian los simples policías sino que los hacen quienes ostentan el mando.

Lo que no se entiende es la demora en el pago de los adicionales a los policías que realizan esta importante tareas cuando las empresas, municipios, gremios  y clubes deportivos pagan en tiempo forma. Y algunos hasta 24 horas antes de los eventos abonan por el servicio.

El pago de los adicionales que realizan los efectivos policiales siempre ha estado en una nebulosa. Pero que deban esperar hasta 5 meses para cobrarlo con una inflación que licua cualquier sueldos, es inhumano y hasta burlesco para alguien que además de vocación tiene un alto sentido de la responsabilidad para los ciudadanos que promete proteger y cuidar.