El fiscal penal 6 de Salta, Horacio Córdoba Mazunaric, analiza las medidas a adoptar en el marco de la toma de rehenes que se desarrolla en la delegación salteña de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), junto a un comité de crisis especialmente conformado para destrabar el conflicto.
El conflicto comenzó días atrás cuando durante una asamblea se decidió separar del cargo de secretario gremial al dirigente Omar Pereyra, quien fue hoy el responsable e instigador de la toma de la sede sindical con alrededor de 15 rehenes, incluyendo a Flores, en la sede de la calle San Luis al 500.
En diálogo con periodistas y policías y mostrando bidones con kerosene, los secuestradores condicionaron el final de la toma de rehenes a la renuncia de Flores como secretario general de la seccional local de UTA. En tanto, se movilizaron hacia la sede gremial varios efectivos policiales, entre ellos del Grupo de Operaciones Policiales de Alto Riesgo (Gopar) y de la Infantería, que acordonaron la zona.
“El objetivo prioritario es arribar a una solución que no implique daños o lesiones a las personas que están retenidas ni a los manifestantes que se encuentran involucrados”, dijo Córdoba Mazuranic, que interviene en el hecho. El fiscal anticipó que se conformó un comité de crisis y se estudia el modo de destrabar el conflicto gremial.
En diálogo con Télam, el secretario general de la UTA a nivel nacional, Roberto Fernández, calificó al episodio como producto de "una interna sindical" y descalificó a la toma. "No compartimos para nada la metodología de dirimir un conflicto interno, poniendo en peligro a los rehenes", señaló.
El sindicalista anticipó que "en el primer vuelo" disponible "viajará un veedor de la secretaría de Interior de la UTA, para interiorizarse de la situación y ponerle punto final a esta grave situación, como así también lograr el desalojo de la sede gremial".
Fuente: Agencia Télam